Equipos para el tratamiento de flacidez
La flacidez es un proceso progresivo que afecta tanto a la piel como a la estructura muscular, causado por la disminución del colágeno y la elastina, proteínas esenciales que aportan firmeza y soporte al tejido.
Con el paso del tiempo, la exposición solar, el envejecimiento natural y ciertos hábitos de vida, la piel pierde tensión, dando lugar a un aspecto más laxo y envejecido.
En Irradia, la flacidez se aborda con tecnología médica de última generación, mediante dos alternativas eficaces y seguras: LASEmaR 1500, láser médico-quirúrgico para tensado cutáneo y remodelado, y Venusian CO₂, sistema de carboxiterapia avanzada para estimular la producción de colágeno y mejorar la elasticidad.
¿En qué consiste el tratamiento para la flacidez?
El tratamiento busca reestructurar las fibras de colágeno y elastina, devolver la firmeza y redefinir los contornos faciales y corporales sin necesidad de cirugía.
- Con LASEmaR 1500 se utiliza tecnología láser de diodo de 1470 nm para realizar el procedimiento EndoliftX®, que estimula la retracción del tejido y la formación de nuevo colágeno desde el interior. Es una técnica mínimamente invasiva, con resultados visibles desde la primera sesión y sin necesidad de bisturí ni anestesia general.
- Con Venusian CO₂ se aplican microinyecciones controladas de dióxido de carbono, que activan la microcirculación y la oxigenación de los tejidos, favoreciendo la regeneración celular y el tensado natural de la piel de forma progresiva.
Ambas tecnologías pueden aplicarse en rostro, cuello, brazos, abdomen, muslos o cualquier zona con pérdida de firmeza.
La flacidez es un problema muscular y de la piel debido a disminución crónica del colágeno y la elastina, sustancias esenciales para su mantenimiento y fortalecimiento estructural.
¿Qué equipo médico se utiliza para el tratamiento de flacidez?
El médico seleccionará el equipo más adecuado en función del tipo de flacidez (facial, corporal o mixta), la profundidad del tejido y las necesidades del paciente.
LASEmaR 1500
Venusian CO2
Ventajas del tratamiento con Venusian CO₂ y LASEmaR 1500 para flacidez
- Procedimientos no quirúrgicos ni invasivos.
- Estimulación natural de colágeno y elastina.
- Resultados visibles desde las primeras sesiones.
- Mejora de la firmeza, la textura y el contorno cutáneo.
- Tratamientos ambulatorios y de rápida recuperación.
- Sin incisiones ni cicatrices.
- Alta seguridad y precisión médica.
- Resultados progresivos y duraderos.
Resultados esperados y número de sesiones
Los resultados dependen del grado de flacidez y de la tecnología empleada:
Con LASEmaR 1500, los efectos son inmediatos, con una retracción cutánea visible tras la primera sesión y mejora progresiva durante los siguientes meses gracias a la regeneración de colágeno. Normalmente basta una sola sesión.
Con Venusian CO₂, la mejora se observa de forma gradual. Tras varias sesiones, la piel se nota más firme, tonificada y elástica. Se suele recomendar un ciclo de 6 a 10 sesiones, con refuerzos periódicos para mantener los resultados.
Preguntas frecuentes sobre el tratamiento de flacidez
¿El tratamiento de flacidez es doloroso o requiere anestesia?
No. Con LASEmaR 1500 se emplea anestesia local y la molestia es mínima. Con Venusian CO₂ las microinyecciones son controladas y prácticamente indoloras.
¿Cuáles son los efectos secundarios o riesgos más comunes?
Pueden presentarse leves enrojecimientos o sensación de calor transitoria, que desaparecen en pocas horas. Las complicaciones son infrecuentes.
¿Hay tiempo de recuperación? ¿Puedo volver a mis actividades normales de inmediato?
Sí. Ambos tratamientos son ambulatorios y permiten retomar la rutina diaria el mismo día o al siguiente.
¿Cuánto tiempo duran los resultados y cuándo debo hacer un mantenimiento?
Los resultados de LASEmaR 1500 se mantienen durante varios meses o incluso años. En el caso de Venusian CO₂, se recomiendan sesiones de mantenimiento cada cierto tiempo para sostener la firmeza lograda.
¿Cuánto cuesta el tratamiento de flacidez?
El coste varía según la zona tratada, la tecnología empleada y el número de sesiones necesarias. Se recomienda una valoración médica personalizada para definir el plan más adecuado.
